En Distribuciones Renoven nos preocupamos por el medio ambiente. Por ello, ofrecemos productos que garanticen un aislamiento térmico adecuado y garanticen la máxima eficiencia energética de tus sistemas de climatización.
Las ventanas y puertas son las principales estructuras por las se pierde calor (entre un 25 % y un 50 %). Por ello, un buen cerramiento resulta imprescindible para conseguir una eficiencia energética apreciable. En Distribuciones Renoven ofrecemos productos de calidad para que nuestros clientes noten una mejoría significativa en la factura de la energía y en la comodidad en el hogar o en la oficina.
Gracias a una adecuada instalación de puertas y ventanas podemos ayudar a reducir el consumo de energía y con ello proteger el medio ambiente de una extracción innecesaria de combustibles.
Confía en Distribuciones Renoven y estudiaremos tu caso con detenimiento para ofrecerte la alternativa más eficiente y estética para tu proyecto. Te orientaremos en el mundo de las puertas y ventanas de aluminio y PVC para que tomes la decisión que mejor se ajuste a tus necesidades y a tu presupuesto. Te ayudaremos a determinar el ahorro energético teórico que puede implicar la instalación de ventanas con un adecuado aislamiento térmico.
Ponte en contacto con Distribuciones Renoven. Estamos a tu disposición en cualquiera de nuestras delegaciones.
¡Si quieres ahorrar en tu factura y proteger el medio ambiente, adquiere las ventanas de Renoven!
El aislamiento térmico es un gran aliado en la lucha contra el cambio climático. A la hora de cuidar el planeta, cada medida cuenta, pero esta aporta una serie de beneficios que no podemos pasar por alto. Mantener la temperatura dentro de un hogar, sin importar la que haga fuera, es muy importante para cuidar el medio ambiente.
Un correcto aislamiento térmico es una apuesta sincera por la sostenibilidad, ya que se optimiza en gran medida el consumo energético. En una realidad en la que los recursos son limitados y tienen usos alternos, es esencial optimizar su uso. En este sentido, los hogares llegan a despilfarrar una cantidad ingente de energía, en especial en los momentos del año en los que las temperaturas son extremas.
No importa que haga frío o calor, la calefacción o el aire acondicionado entrarán en funcionamiento y, por este motivo, las centrales eléctricas redoblarán sus esfuerzos. Así, el uso de la energía en los hogares está íntimamente relacionado con la sostenibilidad de la sociedad moderna.
La principal ventaja de los aislamiento es que logran reducir el impacto energético de cada hogar. La cantidad de energía irradiada al exterior cuando arrancamos la calefacción, por ejemplo, es mucho menor. Las paredes de los edificios retienen el calor e impiden que se siga usando energía para mantener la temperatura constante. Con menos trabajo del sistema de calefacción, logramos los mismos resultados, pero consumiendo menos.
Por suerte, el desarrollo de medidas ecológicas para los aislamientos se une a los beneficios en ahorro energético. Esta combinación contribuye a mejorar la instalación y el uso de estas soluciones. Por un lado, se potencia un menor consumo, el cual debemos tratar de llevar a cero y, por el otro, contamos con materiales no contaminantes para evitar cualquier tipo de problema a mayores. Así, los riesgos externos se ven cubiertos con creces.
Por otro lado, también intentamos utilizar materiales naturales y respetuosos con el medio ambiente. Lo común era que recurriésemos a productos como la espuma de poliuretano, la cual contiene productos como el benceno y el tolueno que resultan muy contaminantes. Cualquier filtración a las aguas freáticas o dejarlo tirado en la zona de la obra acarreaba problemas. Sin embargo, en la actualidad utilizamos materiales como el corcho proyectado para fachadas. También es habitual trabajar con aislamiento insuflados como la celulosa.
El corcho es una respuesta del sector a una demanda de soluciones sostenibles. Lo normal es recurrir a combinados de productos químicos, los cuales causan graves daños en determinadas circunstancias. Con este corcho se logra un buen aislante, tanto acústico como de temperatura, que durará durante años sin problemas.
No nos basta con lograr una reducción del consumo energético, sino que para nosotros es necesario evitar cualquier contaminación. Por ello, tras realizar una obra o reforma para mejorar el aislamiento de un edificio, los operarios encargados limpian el lugar de la obra a fondo y eliminan cualquier resto de los trabajos. Esto limita, en la medida de lo posible, que cualquier material resulte contaminante. Una vez recogidos, se reciclan para que vuelvan a ser útiles reduciendo así el impacto del aislamiento térmico en el medio ambiente.
El sistema de aislamiento térmico de Distribuciones Renoven no genera ningún tipo de impacto medioambiental. Al reducir las pérdidas de calor a través de la fachada hasta en un 70%, reduce también la emisión de dióxido de carbono procedente de la combustión de nuestras calefacciones y en verano, ahorra en energía de refrigeración. Así, mientras conseguimos el máximo confort en casa, ayudamos a cuidar nuestro entorno.
Al proteger nuestra vivienda del exterior, con Distribuciones Renoven evitamos, en invierno, la pérdida de calor y en verano, su entrada, lo que repercute positivamente en nuestras facturas de luz, gas y/o gasóleo. Ahorraremos energía y dinero desde el momento de su instalación.
En Distribuciones Renoven llevamos más de 20 años dedicándonos a la instalación de aislamientos térmicos. Disponemos de una amplia variedad de servicios y materiales para adaptarnos a las necesidades de cada uno de nuestros clientes y, entre todos, crear mayor beneficio para el medio ambiente a través de la instalación de puertas y ventanas aislantes.
Llámanos al teléfono 948 302 079 y te atenderemos encantados e inmediatamente.